SOL II
|
Posted:Sep 30, 2011 9:01 am
Last Updated:Jun 23, 2012 2:22 pm
4562 Views
|
Sol estaba trabajando, tenía el móvil encima de su mesa, cada vez que sonaba quería que fuera él, pero no lo era, llevaban días sin saber nada el uno del otro, era un dolor insoportable, porque dolía tanto?.
Cogía el móvil, lo miraba, pensaba en escribirle un mensaje, llamarle, no lo hacía, lo volvía a coger, así llevaba días, tenía que ser fuerte, no podían volver a empezar, habían decidido terminar y eso era lo que tenían que hacer.
De repente suena un pi-pi, Sol mira su móvil, no quiere ver ese mensaje, desea con todas sus fuerzas que sea él, pero a la vez no quiere llevarse otra desilusión si no es así, lo desea tanto que tarda un rato en mirar el mensaje. Por fin lo hace y si, es él,
dice que no puede seguir sin verla un minuto más, sin besarla, sin sentirla, sin olerla.
Sol esta feliz, eso es lo que quiere también, verle, besarle, olerle, sentirle.
No tarda en contestar con casi las mismas palabras. No pueden poner fin, no capaces, deben, pero no quieren, sus sentimientos no les deja.
Después de unos mensajes entre los dos, deciden verse al rato. Sol deja todo pendiente en la oficina y se inventa algo absurdo para irse. Esta nerviosa, como una adolescente, coge el coche y conduce tan rápido como nunca antes lo habían hecho.
Los dos están como locos por volver a besarse, no ven el momento de hacerlo.
Llega primero Sol, se han citado en unos apartamentos a los que antes iban con bastante frecuencia, la chica de recepción ya les conoce y se alegra al verla, le dice:
-Vaya, cuanto tiempo sin verla por aquí, que alegría volver a tener aquí a mi pareja preferida.
Sol se ruboriza, pero a la vez no puede evitar sonreír. No pensaba que volvería a ir allí nunca más y esta muy contenta por hacerlo, aunque en el fondo sabe que no debería estar allí, no ha sido fuerte en su decisión. Pero no puede, desea besarle.
Coge la llave y sube al apartamento, no sabe que hacer, desnudarse, sentarse, esta nerviosa, tan nerviosa como si fuera la primera vez que queda con él.
De repente llaman a la puerta, Sol abre rápido, se ven, se miran, sonríen, no hablan, se besan, se dan un beso apasionado, tan apasionado que parece que se va a acabar el mundo. No pueden dejar de besarse, no pueden, no pueden, siguen besándose a la vez que van caminando hacía la habitación.
Él la pone contra la pared mientras sigue besándola con fuerza y pasión, comienza a desnudarla, esta mirando su cuerpo como si nunca antes lo hubiera visto, lleva días sin hacerlo y eso le estaba matando. Contra la pared comienza a besarle todo su cuerpo, a pasar su lengua por todos los rincones, sin olvidar uno.
Sol esta muy excitada, no puede parar de gemir, como deseaba volver a sentirle, volver a sentir esos besos por su cuerpo, su lengua recorriendo cada rincón de su piel, no para de gemir, él esta muy excitado también, desea penetrarla, no puede aguantar más.
Contra la pared siguen besándose, él la coloca de espaldas, le arranca el tanga y él se quita los pantalones, tiene su miembro tan erecto que parece que le va a estallar, lo que más desea es volver a sentir su miembro dentro de ella.
Sol le pide a gritos que le introduzca su miembro, que no puede más, que necesita sentirle dentro, él obedece de inmediato, nota en la punta de su miembro el calor que desprende Sol, le introduce la puntita despacio y escucha ese gemido de placer que tanto estaba echando de menos, de repente le introduce todo su miembro erecto dentro de ella, agggggg, no pueden con el placer inmenso que están sintiendo.
Sol no para de gemir, siente tanto placer que sus chillidos hacen que él se ponga aún más erecto.
Están tan excitados que Sol no tarda en tener un orgasmo, él nota como el flujo de su orgasmo recorre su miembro y esta a punto de estallar, no para de besarla el cuello a la vez que sus embestidas cada vez más fuertes, esta a punto de ……, cuando Sol vuelve a tener otro orgasmo, ahora no puede más, tanto calor ha hecho que su miembro se ponga más erecto y grueso y rompe en un chillido con un orgasmo salvaje.
Da la vuelta a Sol y la besa, sigue besándola con la misma pasión que cuando han abierto esa puerta, no puede dejar de besarla, no pueden dejar de besarse, no pueden dejar de sentirse, no pueden dejar de olerse, no pueden, no pueden, no pueden, no pueden, no pueden…………………….
|
|
|
4
Comments
|
|
SOL
|
Posted:Sep 28, 2011 2:35 pm
Last Updated:Jun 22, 2012 2:19 pm
2533 Views
|
Esa noche Sol se sentía algo confusa, estaba triste y contenta a la vez, era una sensación extraña, tenía todo lo que una mujer puede desear, pero no era feliz, le faltaba él, nunca antes le había extrañado tanto. Y apenas hacía unos minutos que le había dejado de besar.
Su marido la quería con locura, ella también le quería a él, pero no podía evitar pensar en él, en esa persona con la que había compartido tantas cosas en su juventud y que ahora de nuevo se había cruzado en su camino.
Demasiado tiempo siendo amantes, demasiado tiempo compartiendo momentos, encuentros fugaces, muy pasionales, los dos casados y no podían evitar el cuando tenían un momento verse, aunque tan solo fueran unos minutos para poder besarse.
Nunca antes había disfrutado tanto del sexo, como con él, tantas locuras vividas con él, tantos sentimientos despertados, tanta confusión, pero a la vez tanta felicidad.
Cuando estaban juntos, el tiempo se paraba, no había nada más, tan solo ellos dos, ni sus familias, ni sus trabajos, ni problemas, ni nada, tan solo ellos dos.
Ellos dos que no podían evitar al verse besarse, con tanta pasión que parecía que el mundo se iba a acabar en ese instante, no podían dejar de besarse, de acariciarse, de olerse, de sentirse. Siempre acababan diciendo, esta es la última vez, así no podemos seguir, esto no esta bien, pero nunca llegaba ese día. Ninguno de los dos se sentía con fuerza como para no seguir besándose el uno al otro, seguir sintiendo sus cuerpos desnudos, sintiéndose el uno dentro del otro, no podían poder fin, querían, pero no podían o no querían pero debían.
Esa noche Sol sabía que había tomado la decisión correcta, por eso estaba feliz, pero el pensar que no iba a volver a besarle la entristecía demasiado.
Podrían aguantar, serían fuertes, tendrían que serlo, tenían que respetar la decisión que Sol había tomado, que tanto había meditado, que ninguno de los dos quería, pero era lo que debían, pero no lo que querían en realidad.
Sol estaba triste y a la vez feliz. Triste y feliz, que dos estados más encontrados.
Triste por saber que no iba a volver a besarle y contenta porque era la decisión correcta, tendrían que conformarse con los recuerdos de sus momentos vividos, pero ser fuertes y no volver a caer en las tentaciones. No más besos, no más caricias, no más………., no más……….. , no más……………
Querer o Deber?
Sol o Luna?
|
|
|
1
comment
|
|
Delfines en la ciudad.
|
Posted:Sep 23, 2011 3:31 pm
Last Updated:Dec 28, 2018 4:14 pm
2405 Views
|
Delfines que besan.
Delfines que acarician.
Delfines que hacen el amor.
Delfines que proporcionan orgasmos de colores.
Delfines que hacen sonreír.
Delfines que escuchan.
Delfines que ayudan.
Delfines que hacen sentirte especial.
Podríamos vivir sin delfines?
|
|
|
8
Comments
|
|
To link to this blog (Holitas1973) use [blog Holitas1973] in your messages.
|
|
|
| Sun |
Mon |
Tue |
Wed |
Thu |
Fri |
Sat |
| |
|
|
|
|
|
1
|
2
|
3
|
4
|
5
|
6
|
7
|
8
|
9
|
10
|
11
|
121
|
13
|
14
|
15
|
16
|
17
|
18
|
19
|
20
|
21
|
22
|
23
|
24
|
25
|
26
|
27
|
28
|
29
|
30
|
31
|
|
|
|
|
|
|
